El naranjo es un arbusto procedente de las zonas cálidas de China. Fueron los árabes quienes trajeron naranjos al Mediterráneo por primera vez. Los árabes se afianzaron en el siglo VII en toda España, y extendieron su cultivo en amplias zonas del sur del país como Valencia, Murcia, Sevilla. También llevaron su cultivo a Sicilia. Cristóbal Colón lo llevó a América, donde el cultivo naranjal se instauró en Florida y California. A partir del siglo XVIII se generaliza el comercio de la naranja, hasta entonces considerada como un fruto muy caro.
Entre sus propiedades y beneficios destacan:
A Nivel Cosmético: tónico calmante, hidratante, astringente, antioxidante.
A Nivel Terapéutico: antiespasmódico, carminativo, digestivo, febrífugo, sedante y estimulante.
A Nivel Psicológico: da equilibrio y fortaleza, ilusión por la vida y alegría.
Es uno de los 12 aceites esenciales fundamentales para tener en cabina e iniciarse en el mundo de la aromaterapia. Un poderoso hidratante y reequilibrador de la piel; indispensable en las fórmulas magistrales faciales para tratar una gran diversidad de afecciones del cutis.Tiene propiedades nutritivas, anti-arrugas y regeneradoras de la piel, por lo tanto candidato a incluir en las preparaciones para tratamientos faciales y corporales anti-edad.
Es un aceite esencial para las formulaciones de aceites corporales anti-stress pues a nivel emocional aporta equilibrio y fortaleza, paz, alegría e ilusión por la vida.