El Aceite Esencial de Jengibre se cree que es originario de la India y que fue una de las primeras especias en llegar a Europa desde Asia. Sus propiedades beneficiosas han sido apreciadas a lo largo de los siglos siendo ya mencionadas por el filósofo chino Confucio, por Dioscórides y en el Corán. Los griegos y los romanos lo usaron también en su doble función de medicamento y especia. Los antiguos egipcios la cultivaban y la usaron en la alimentación con el objetivo de prevenir y frenar epidemias. Dioscórides lo recomendaba para activar la circulación.
Es conocido por su gran poder antiinflamatorio y se recomienda incorporar en la dieta a diario para combatir los estados inflamatorios y concretamente en caso de artritis.
Tiene un gran poder calorífico y alcalinizante. Debido a su sensibilidad botánica se requiere un origen de cultivo asiático puesto que el jengibre americano es altamente acidificante siendo peligros su uso.
Entre sus propiedades y beneficios destacan:
A Nivel Cosmético: el Aceite Esencial de Jengibre tiene varias propiedades a nivel cosmético, ya que es antiinflamatorio, detoxificante y tónico.
A Nivel Terapéutico: es un aceite esencial muy eficaz para combatir todo tipo de náuseas incluso durante el embarazo (siempre bajo supervisión). Ayuda a eliminar flatulencias. En medicina china se trata el síntoma de útero frío con el objetivo de aportar temperatura y mejorar la fertilidad. Ejerce como detoxificante intestinal. Ideal para combatir los cambios de temperatura por desequilibrio de yin y los sofocos en la menopausia.
A Nivel Emocional: el Aceite Esencial de Jengibre estimula las energías y al mismo tiempo ayuda a combatir el agotamiento nervioso, aliviando el cansancio y la fatiga crónica. Transmite calor al corazón y descubre los sentimientos dormidos. Potenciador de la memoria, Trabaja con los estados de apatía y resignación. Junto con el Aceite Esencial de Nuez Moscada y el Aceite Esencial de Clavo trabaja con los vértigos de origen inconsciente.
Es uno de los aceites esenciales que ayudan a equilibrar las fórmulas; similar al limón pero con polaridad ligeramente yang. De elección junto con el comino para las fórmulas magistrales encaminadas a equilibrar un sistema digestivo con exceso de yin.